El tiempo se ha mostrado amable hoy y ha lucido el sol y una temperatura agradable para caminar. Por el camino nos hemos encontrado con algunas personas que arreglaban los "portillos", que son las paredes de piedra que bordean las fincas.
Alconera quedaba atrás y por el camino íbamos viendo el valle hasta la Sierra del Castellar que se nos ofrecía en varios colores que llamaron la atención de los chicos.
Pronto llegamos a Santo Domingo, donde amablemente nos recibió el padre del arrendatario, el Sr. Santana, que nos permitió hacer una visita por el bonito cortijo, donde apenas quedan ya restos de lo que fue el monasterio. Pero los chicos se sorprendieron con la cantidad de aperos antiguos que encontraron allí, y sobre todo un coche muy antiguo junto al que gustaron de hacerse fotos.
Una vez que terminamos la visita, cruzamos la vía del tren para salir junto a los terrenos de la cementera y regresar al cole. Por el camino nos encontramos algunos de los frutos exquisitos que da nuestra "jesa". Ahora nos toca organizar toda la información que tenemos para la guía que estamos elaborando, pero... aún nos queda mucho por investigar.
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